sábado, 6 de julio de 2013

Pastel de la ruta 66

 
Joan contactó conmigo a través de un amigo. Me explicó que le gustaría un pastel de la ruta 66 americana. En aquel momento no me sonó de nada, luego al ir mirando los enlaces que me mandó sí recordé haber visto algún reportaje de esta famosa ruta.
 
Quería llevar la ruta a casa para celebrar los 3 años con su pareja, ya que no podían hacerla de momento. Esta ruta recorre EEUU de costa a costa, originalmente desde Chicago a Los Ángeles.



El Cadillac debería haber sido azul, cierto, pero en mi obsesión por mantener cierta armonía colorística en  los pasteles, lo hice blanco nacarado. Fue un pequeño fallito.
 
 

Como detalles del pastel puse el arco de St. Louis (The Gateway to the West), casi al principio de la carretera, aunque no se aprecia mucho en las fotos, la escultura llamada Cadillac Ranch, en Amarillo, Texas (donde puedes dejar tu huella pintando con sprays en los coches semienterrados), el cráter de Arizona (y algunos cactus típicos), y como fin cogí la playa de Santa Mónica, uno de los finales reconocidos para esta ruta, en Los Ángeles.

 
Personalmente nunca me ha atraído demasiado EEUU, pero viendo tantas fotos y leyendo tantas curiosidades de la ruta, casi me dan ganas de hacerla. Igual, como dice mi marido, cuando seamos viejos y nos compremos una Harley, ja ja ja, uno de los vehículos típicos con los que se hace esta ruta  (aunque yo sigo sin verme encima de una moto de esas, la verdad).

Espero que os haya gustado, para mí es un reto hacer pasteles con forma (ya veis como quedó la pendiente de esta carretera, no sé si me atrevería a bajar por ahí...). El resultado me ha gustado mucho, añadiendo los sombreados y el efecto arena.
 
¡Hasta la próxima! Sed buenos ... o no, pero sobretodo pasadlo bien.

Pastel de comunión para Paula

 
 
Paula es la hija de Merche, una antigua compañera del colegio. Hizo la comunión a finales de mayo, y le gustó mucho el pastel que hice para otra comunión el año pasado. Aquel era todo en tonos rosa y blanco, pero Paula quería las flores en rosa y lila (qué decir, no me cuesta nada introducir ese color en mis pasteles, ya sabéis que me encanta, je je).
 
Merche me envió una foto de su niña con el vestido, e hice una reproducción de ella (aunque me olvidé la diadema de florecillas, ups, me di cuenta demasiado tarde).
 
Las galletas con el nombre tenían un borde de purpurina, y las puse rodeando el pastel.
 
Aquí os dejo unos detalles del pastel:
 
 
La comunión se celebró en un restaurante encantador en el Port Olímpic. Siempre hay mucha gente por allí, me gusta mucho esa zona, pero la verdad es que hacía mucho que no iba por allí. Claro, solía hacerlo antes de tener niñas, ya sabéis...
 
Prepararon una mesa en el salón del restaurante, en un ventanal. El día había estado medio nublado, pero en aquel momento entraba un sol que me espantaba, pensando en el pastel. Además las fotos salieron regular con tanta luz, aunque bajé los estores. Y yo con cámara nueva que no había tenido ni tiempo de investigar, en fin.
 
Espero Paula que fuera un día especial y que te gustara el pastel. Me gustaron mucho los detallitos para los invitados, unas latas con su foto y alguna sorpresilla dentro ¿qué sería?.
 
Y a vosotros espero que os haya gustado el pastel, nos vemos en breve que tengo otro post pendiente, donde nos vamos de ruta. ¡Un abrazo y a disfrutar del veranito!