domingo, 8 de febrero de 2015

Pastel sin gluten de Peppa Pig para Aina




Miriam me preguntó hace un tiempo si había hecho bizcochos sin gluten. Algo había hecho hacía años, leído bastante, sobre trucos y harinas. La temática: Peppa Pig, que le encanta a la peque que cumplía 3 añitos. Pues esa iba a ser mi primera tarta de Peppa Pig.

A Aina le encanta bailar, y los Canta Juego. Iba a hacer a Peppa y George con un CD de este grupo, sentados en el campo, ya tenía la imagen para pintarla. Pero con esta semana de frío y nieve que hemos tenido por aquí, y que ordenando algunas cosas me encontré el cortador de copo de nieve, que me encanta, decidí darle un toque invernal añadiendo unos cuantos copos azules y poniéndoles un gorrito y una boina de lana a los personajes, y bufandas para ir bien abrigaditos. También unas bolas de nieve a cada uno en la mano (aunque no os diré que me dijo mi hija pequeña que parecían al principio, jajaja, cuando no le había quitado el "pico" que deja la boquilla al caer la glasa). Algunas florecillas silvestres sobrevivieron a la nieve y acompañaron a los cerditos.


 
Ha sido todo un reto el bizcocho sin gluten, porque además fui de valiente haciéndolo directamente, sin pruebas. Había hecho alguno hace muchos años, cuando mi hija no podía tomar leche y hacía montones de pruebas "sin", y aunque ella no es celíaca, intentaba adaptar algunas recetas a varias alergias/intolerancias.
 
Subió muy bien, pero la miga quedó algo floja. Al ponerle el almíbar se rompió un poco, y me dio miedo de que no aguantara y se hundiera todo. Al despertar el sábado fui corriendo a ver cómo estaba, pero hay estaba aguantando como un campeón. Así que, mejorable por este motivo, pero parece que les gustó, sobretodo a la protagonista de la fiesta.

 
 
 
 
Así que prueba superada sin gluten, con trancazo impresionante incluido, que cuesta el doble siempre hacer las cosas (y con lo exigente que soy con las cosas que hago, no las tenía todas conmigo).
 
Espero que os haya gustado y ¡hasta la próxima!
 
 
 
 
 

miércoles, 12 de noviembre de 2014

Smiley Pumpkin 2014: Terror en Amityville




Otro año más pasa. No sé qué pasa que, desde que tengo hijas, el tiempo vuela de esta manera. O ellos te hacen sentir el paso del tiempo, o es que ya no cunde como antes, pero el caso es que desde los 30 a los 40 me da un poco de vértigo pensar en el paso de los años.

Pero no nos pongamos melancólicos. De nuevo contactó Xavi conmigo, recordándome que llegaba Halloween, y con él Smiley Pumpkin. Este año, la verdad, iba bastante despistada por temas varios personales y de trabajo. Por si no recordáis, Smiley Pumpkin es un festival que hace un grupo de amigos alrededor de una película de miedo. En estos enlaces podéis ver los pasteles de 20132012.

Este año la película elegida era "Terror en Amityville", la historia de una familia que se muda a una casa donde hubo una serie de asesinatos hace años. Espíritus, la casa que parece que cobra vida e influye sobre los habitantes, ya sabéis, todos esos ingredientes habituales de casa encantada.

La idea era hacer la casa, con su fachada característica, y esas ventanas de la buhardilla que le daban un aspecto de ser vivo.

Para simular la sangre goteando por la fachada, primero cogí el colorante diluido con el pincel para que cayeran goterones, aunque acabé con una jeringa imitando las salpicaduras (seguro que, a los que tenéis niños, os ha pasado alguna vez y ha acabado la pared del salón o la cocina así salpicada de Apiretal, ja ja ja). Esta vez fue divertido porque no me tocaba limpiar.


Aquí podéis ver un detalle de la base. Una condición es que tiene que aparecer el nombre del festival y el año. El detalle del hacha y los troncos aparece varias veces en la película, cuando el comportamiento del hombre empieza a cambiar, un clásico esa escena cortando troncos como poseido.


Cada año el pastel va acompañado de unas galletas, de la misma temática. Al principio de la película se ve la escena de los asesinatos de la familia en sus camas, y eso quería representar. Así que manchas de sangre y los nombres como escritos con el dedo manchado de sangre.Y una huella dactilar, que no analicen de quién es porque acabaría a la sombra...


Por último os dejo una foto que me envió Xavi de la puesta en escena.


Espero que os haya gustado, ¡y hasta el próximo Smiley Pumpkin!

viernes, 30 de mayo de 2014

Comunión de Laura


Laura hizo la comunión el día 17 de mayo. Es la misma niña a la que poco antes había hecho el pastel de La Voz Kids para su cumpleaños. Tenían todo pensado para el evento: pastel, regalos, decoración, ... Todo clarísimo respecto al pastel (colores y pisos), pero dejándome vía libre con la decoración del mismo. Sus premisas: blanco, 3 pisos, con flores lilas y purpurina. La muñequita para coronar el pastel ya la tenían comprada, así que este tema resuelto.

Como el pastel iba a ser todo en blanco y lila, usé varios tonos del mismo color para los diferentes adornos, degradando el color con blanco. También querían su nombre en galletas, y con purpurina. Adorné las letras con florecillas iguales a las del pastel y as situé justo delante de la bandeja.
 

Querían regalar galletas decoradas a los niños, con los mismos tonos del resto. Pusimos cuatro en cada uno de los dos cestitos de mimbre, y algunas otras más las apartamos. Todas son de temática primaveral: flores, mariposas, manzanas, y, por supuesto, corazones, que les gustan tanto a las niñas. Recorté unos cuantos corazoncitos con la troqueladora,iguales a los que llevaba cada galleta con el nombre y la fecha, para adornar la mesa.


Así dejamos la mesa con las cosas que llevábamos y algunas más que colocamos:


Y así quedó finalizada, con los globos a juego y todos los detallitos que faltaban. Preciosa. Se nota que todos los detalles estaban pensados y preparados con cariño.


Aquí os dejo  la protagonista, Laura, una niña encantadora y dulce, un amor, y guapísima con su vestido blanco con florecillas. Su madre me decía que a quién habrá salido tan amorosa, vaya pregunta, está clarísimo: a su madre.


Gracias familia por dejarme participar en este día especial para todos, ha sido un verdadero placer. Nici, la foto de tu niña mandándome un beso desde allí me robó el corazón.

Para los que podáis acercaros, el restaurante merece una visita. Se llama "Tanta", en el centro de Barcelona. Un restaurante de los muchos que hay del famoso chef peruano Gastón Acurio. Un restaurante precioso, acogedor, limpísimo, con un personal muy agradable, y un olorcillo que salía de la cocina que ni os cuento. No lo conocía, pero me he prometido volver como clienta

Espero que os haya gustado, ¡nos vemos en la próxima entrada!.