Curso de macarons con Atelier Sucreme

Macarons, esas delicias hasta hace poco desconocidas para mí. No porque no supiera lo que eran (plorque están por todas partes), sino porque no había probado ninguno aún. Bueno, no es verdad del todo, porque hice un intento en casa y aunque fue un desastre, la masa estaba deliciosa. Pero quería probar alguno hecho por especialistas, y que mejor que las chicas de Atelier Sucréme.

Como ya sabéis, Atelier Sucréme acaba de estrenar taller. No soy del todo imparcial hablando de estas tres chicas, porque las conozco hace años, pero es que además de las cosas tan maravillosas y preciosas que hacen, rebosan simpatía y comparten trucos contigo, algo que es de agradecer sobretodo cuando haces un curso.

Con lo primero que aluciné fue con el brillo del merengue italiano, yo que hice un intento con la batidora de varillas, sola, agarrando el bol como podía mientras batía sin parar y echaba poco a poco el caramelo. Que momento, me río yo sola cuando me acuerdo.

Mezclar la masa da un poco de apuro, por no decir miedo, de que te pases, de que se baje el merengue. Y luego con la manga, uf, que no la pones recta, que me queda un pico, que se me escapa un chorretón.

Pero luego los ves tan bonitos ahí en la bandeja y sabes que van a estar tan buenos que casi quieres que la mitad salgan torcidos para comértelos.

Lo pasamos estupendamente, y es que que mejor que poder mezclar dulce, simpatía y un local acogedor (además de tenerlo tan cerquita). Para alguna que decía que el taller no era tan rosa, no sé si podéis apreciar en la foto la cantidad de boles rosaditos, igualitos a la niña bonita, la Kitchen Aid. Y a juego con lenguas, batidores de mano, rallador, y un sinfin de utensilios, que lo suyo les ha costado conseguir. 

Estos fueron los macarons que hicimos:

• Macarons de fresa y pistacho.
• Macarons de chocolate con frutas del bosque y frambuesa
• Macarons a los tres cítricos: naranja, lima y limón.
• Macarons de violeta con crema de violeta.

Unos colores preciosos y unos sabores espectaculares. Cada uno que pruebas piensas: "este es el más bueno", hasta que pruebas el siguiente. Creo que el que más me gustó fue el de cítricos, pero quizás por el calor que ha estado haciendo, como que me apetecía algo cítrico. Pero los de fresa y pistacho, los de chocolate, y los de violeta...

Aquí os dejo las fotos que hice en casa de los que me llevé. Junto con los de violeta hay unos de plátano, que hicieron los maridos 1, 2 y 3 (ellos ya saben quienes son, je je), y que también están deliciosos. ¡Felicidades chicos! Os salieron estupendos.

Pues nada más, ha sido un documento gráfico más que explicativo, pero una imagen vale más que mil palabras ¿verdad?

Chicas, os deseo lo mejos en esta nueva andadura, aunque no dudo ni lo más mínimo que os irá genial. Nos vemos pronto.

A todos los demás, ¡hasta pronto! Y disfrutad del veranito aunque no os vayáis de vacaciones, y sobretodo sed felices.